Atardecer en Joshua Tree. |
Sí.
Otra Ruta Pop.
Pero no otra en su sentido de
cantidad, es decir, una nueva ruta; sino otra en su sentido de diferente.
Porque, no vamos a engañar a nadie: tras el año pasado y aquella Ruta Pop Definitiva, tenía que respetar su denominación. Esos 18.000 kilómetros en un mes, fueron más que definitivos.
Sin embargo, vuelvo a Estados Unidos,
por séptimo verano consecutivo. Y supongo que iré contando alguna que otra
cosa. Ignoro el formato o su periodicidad. Lo que es seguro es que me asomaré
por aquí a contar cosas, hacer fotos de cielos y soles y nubes y carreteras y
carteles, sin olvidar las comidas, que ya sé que sois unos glotones envidiosos
de tanta tortita, hamburguesa, barbacoa, hamburguesa, sándwich o pinta de
cerveza artesanal.
Un desayuno ligero. |
Así que bienvenidos.
Solo contar muy brevemente el
recorrido, que también nace un poco mermado en comparación al año pasado (todo
será una merma respecto a aquello).
Parto, como el año pasado, de
Chicago (desde donde supongo que escribiré algo entre el miércoles y el jueves) y recorreré algo de esas grandes llanuras que la ruta de 2018, al ser
una especie de recuadro, dejó fuera: Misuri, Kansas, Colorado, Oklahoma y, para
terminar, de regreso al Mississippi (cómo no) desde Memphis y por su delta
hasta Nueva Orleans y de vuelta al territorio Faulkner en torno a Oxford. Del 3 al 15 de septiembre y alrededor de 6.000 kilómetros por delante. Mucho cielo abierto (ay, esos cielos de Kansas de aquel primer viaje de 2013), mucha visita a territorios imaginados (pero muy terrenales) de autores fetiches, música en directo y paseos hasta donde haya algo digno de ver.
No me
extiendo en las razones porque eso lo dejaré para cuando vaya acumulando millas.
Venga, que arranco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario